No juzguen demasiado rápido. Esta no es una nota de propaganda hipotecaria. Más bien es una reflexión ligera, casi a vuela pluma sobre la publicidad en la asignatura de lengua.
Las actividades con anuncios publicitarios solían ser mis preferidas. Dedicaba un montón de horas a diseccionar anuncios de revistas para mostrar los mecanismos lingüísticos y literarios que se escondían detrás de esos mensajes en apariencia tan simples. Sin embargo, descubrí muy pronto que a los alumnos no les gusta que les desmonten el automatismo de sus miradas; no acaban de creerse que, detrás de esa propaganda que tanto les impresiona, haya una campaña perversa de márquetin; tampoco les apetece tomar conciencia de que las metáforas, las antítesis, las paradojas, etc. les asaltan más allá de los poemas del libro.
Las actividades con anuncios publicitarios solían ser mis preferidas. Dedicaba un montón de horas a diseccionar anuncios de revistas para mostrar los mecanismos lingüísticos y literarios que se escondían detrás de esos mensajes en apariencia tan simples. Sin embargo, descubrí muy pronto que a los alumnos no les gusta que les desmonten el automatismo de sus miradas; no acaban de creerse que, detrás de esa propaganda que tanto les impresiona, haya una campaña perversa de márquetin; tampoco les apetece tomar conciencia de que las metáforas, las antítesis, las paradojas, etc. les asaltan más allá de los poemas del libro.
Con la (inminente) llegada de pizarras digitales a las aulas, incluir los textos publicitarios audiovisuales debería ser una obligación para el profesor de lengua; y más cuando parece que va a desaparecer la Comunicación audiovisual del Bachillerato. El consumo diario de publicidad de un alumno de Secundaria es bestial; sin embargo, su presencia en los currículos es algo anecdótico. Y su inclusión iría más allá de lo comunicativo, pues es indudable que la educación social y ciudadana está estrechamente ligada a las manifestaciones publicitarias.
No sé hasta qué punto debemos dar cabida a la publicidad en los distintos niveles de la Secundaria. Quizá vosotros hayáis encontrado respuesta a ello. Mientras tanto, aprovecho esta nota para recoger algunos enlaces que tenía recopilados de hace un tiempo:
¿Cuál es el anuncio de la tele que más os gusta? ¿Y cuál a vuestros alumnos? ¿Y a las alumnas?
No sé hasta qué punto debemos dar cabida a la publicidad en los distintos niveles de la Secundaria. Quizá vosotros hayáis encontrado respuesta a ello. Mientras tanto, aprovecho esta nota para recoger algunos enlaces que tenía recopilados de hace un tiempo:
- Publicidad gráfica agresiva (primera) (segunda)
- Publicidad gráfica humorística
- Marcas y empresas de dudosa reputación
- 19 curiosos anuncios
- Anuncios trampantojo y engañabobos
¿Cuál es el anuncio de la tele que más os gusta? ¿Y cuál a vuestros alumnos? ¿Y a las alumnas?
Parece que han retirado el vídeo.
ResponderEliminarQuizá Marx diría lo suyo sobre ese nuevo opio de las marcas, cuando liberar se vive como oprimir. Yo creo que hace mucha falta tratar la publicidad en el aula. Es el lenguaje más poderoso y omnipresente de nuestros días, más incluso que el cine.
Como anécdota y con valor de tal, en la última reunión de padres (madres, más bien) que organizó el maestro de mi hija, en primero de Infantil, dedicó un cuarto de hora en vano a desconvencer: que vale más una pieza de fruta y un desayuno semanal variado que un actimel al día. Pero aunque el maestro sí que estaba "ayudando a las defensas", lo suyo fue un clamor en el desierto. Luego esa misma gente protesta por comprar el libro del curso o porque encima que lo han comprado "lo usan poco". Solo con cambiar el hábito del desayuno, tendrían de pronto mucho más dinero en el bolsillo. Imagino que el maestro tendría que vestir de blanco sobre fondo de laboratorio y decir: "además de maestro, soy padre, y por eso soy experto...".
(Antes me salía un mensaje de "no longer available", pero ahora lo he podido ver.)
ResponderEliminarPrefiero el del falso asesinato del gato, quizá. Los escatológicos no fallan, y la pareja de observadoras, con la subversión de las expectativas, está acertada; lo pondría al mismo nivel. En el del sexo en el avión me gusta el guiño final (si no lo he visto mal): que se disfrute de la confusión. En el de la prostitución, es probable que haya actuado un filtro moral de repugnancia por el tema, que me ha cohibido la risa. El del hospital me parece menos redondo.
He visto el vídeo con los cinco divertídisimos sketchs que me han hecho sonreír, y también el enlace con propaganda agresiva. Es impresionante el análisis de textos que se puede hacer con este tipo de anuncios. Sólo hace falta un cañón en el aula o una pizarra digital. En la publicidad trabajan actualmente los más destacados creativos. Hace unas semanas fui a ver una exposición del fotógrafo Joan Fontcuberta en la que mostraba de modo genial de qué modo las imágenes pueden manipularnos. Era un prodigio de ilusionismo fotográfico. En algún momento quedé totalmente engañado por las propuestas que nos hacía el fotógrafo catalán: JOAN FONTCUBERTA. El trabajo con la publicidad es fascinante y tremendamente creativo.
ResponderEliminarMuy buenos enlaces. Creo que es fundamental trabajar la publicidad en clase, precisamente porque no quieren ver la trampa que esconde. Los anuncios que más enganchan a mis alumnos son los que tienen canciones tontas y pegadizas o que hagan reír (el de "esh una fieshta", rumor con el suicidio del protagonista quizá ocupe el top 1 del año), seguidos de los emotivos o sexies.
ResponderEliminarLos de coca-cola suelen ser muy buenos y en Youtube hay una selección de anuncios del año que dan para trabajar muchos recursos y temas en el aula (ej: Dove)
Me parecen muy buenos todos, y muy útiles para analizar en clase. Yo estoy viendo en 4º de ESO ahora precisamente el texto argumentativo y les resulta más motivador y atrayente ver los mecanismos propios de la argumentación en los textos publicitarios que en artículos de opinión u otro tipo de texto argumentativo.
ResponderEliminarDe los anuncios de la tele recientes el que me parece buenísimo es el de Heineken. A ellos, coincido con Eduideas, les gustan los de canciones o melodías pegadizas que siempre canturrean cuando se les presenta la oportunidad. También les gustó bastante el del los hippies anunciando el Plus p'al salón.
Ja, ja, ja
ResponderEliminarUn video muy bueno. Creo que tendríamos que aprender de la publicidad a la hora de enseñar. Los mecanismos que se utilizan en el marketing podrían ser muy útiles si se aplican en el aula.
Un blog muy interesante. Un saludo
Pues bien, yo te digo los que más gustan a alumnos de la ESO y no lo tengo ni que preguntar! Gustó mucho el de "esh una fieshta" (aunque yo sigo sin verle la gracia). Suelen gustar todos aquellos que tengan caciones o imágenes que llamen mucho la atención, por ejemplo la canción del kandoo (o como se escriba) se hizo muy famosa, tanto quepara final de curso lo bailaron en gimnasia algunos de mi clase; y aunque menos, pero también un poco, el 11811 el ritmillo.
ResponderEliminarY de los de ahora, de los que salen, quizás el que más el de "ya no aguanto este frío, me paso a gas natural" (el hombre helado cantando...)
Poco más se me ocurre ahora...!
Saludos!
Gonzalo: Luchar contra la publicidad es tarea de titanes. Seguro que, hoy día, Don Quijote hubiese lanceado una valla publicitaria... Sólo hay que ver la cantidad de dinero que dedican las empresas a ello.
ResponderEliminarJoselu: No podemos plantear estas actividades como una unidad didáctica de un par de sesiones en el curso; como bien dices, si tuviésemos pizarras digitales y redes en condiciones en las propias aulas, bastaría dedicar quince o veinte minutos a la semana para comentar los anuncios más destacados de la actualidad. Esto tendría sentido, no analizar los anuncios que vienen en el libro que ya están caducos.
Eduideas: El de Dove es muy bueno para trabajar con valores. Ya hablamos de él aquí. Creo que hay muy buenos anuncios con los que abordar temas profundos en el aula.
Marian: El de Heineken explota muy bien los tópicos, y el del Plus es real como la vida misma (ay, aquellos revolucionarios, ubi sunt?). Tienes razón con lo de vincularlo a los textos argumentativos (más consumidos que columnas de opinión), pero también se puede relacionar con textos literarios.
Eduardo: Gracias. Bienvenido a este saloncito de amigos. Ya vi tu blog y parece prometedor. Un saludo.
Cristinaa: Eres una informadora de primera mano. Los que citas me gustan a mí también, sobre todo el de Gas Natural. El uso de cancioncillas tontas (me siento segurooooo) o de voces raras (los de Línea directa de seguros de moto o automóvil) convierte a los anuncios en mensajes que pasan de boca a oído con facilidad.
Marian lo apunta.
ResponderEliminarNo sé si es el anuncio que más les gusta a los jóvenes, pero puedo asegurarte que ha hecho furor estos carnavales. Se trata del anuncio de Digital + en el que salen un grupo de hippies (a lo años 70) con aspecto de llevar un buen colocón. Ubi sunt?, efectivamente.
Si no conoces este blog, vale la pena que le eches un vistazo:
Ojú, la publicidad
Para morirse los cinco, Antonio.
ResponderEliminarEn Andalucía os llevamos delantera: la Comunicación audiovisual (aquí, Medios de comunicación) desapareció este curso. T_T
En cuanto al anuncio que más me gusta, coincido con Marian: el de Heineken (y eso que no soy cervecero ni futbolero).
Excelente selección de videos para trabajar en clase... y con humor, uno de los mejores motivadores. Lo que se aprende con una sonrisa, se recuerda mejor... y con una sonrisa. Y del análisis formal de la publicidad, se puede pasar a analizar el interesante contenido: las apariencias engañan, no prejuzguemos, todo el mundo es inocente mientras no se demuestre lo contrario, el peligro de malinterpretar la realidad sin conocer los antecedentes, las causas, puntos de vista, etc.
ResponderEliminarY gracias por los enlaces.
PD. Mi hija -11 años- ha emitido una sonora carcajada con el del gato y el hospital. Ya te diré la reacción de mis alumnos.
Saludos
Lu: No soy muy bueno sistematizando los recursos, que suelo ir guardando por lugares diversos. Para la publicidad hay páginas magníficas, como el blog que citas (al que llegué gracias a ti) o el de Ángel Encinas que cito en mi nota. En cuanto a los hippies, habrá que plantear un minicarnaval de blogfesores en el próximo evento presencial en que coincidamos.
ResponderEliminarJosé Luis: Creo que aquí también han desaparecido esas optativas; ahora el conseller habla de implantar el idioma chino como optativa de bachiller???, después de haberse cargado la cultura clásica y la comunicación audiovisual (por no hablar de los barracones, las pulgas, etc.)
Carlos: Los modelos de mundo que proyecta la publicidad son curiosos. Fíjate qué valores extraes de unos anuncios destinados a vender hipotecas...
Muy buenos los vídeos. La verdad es que a mí me fascina lo equívoco, la doble lectura, la ambigüedad. Porque eso nos hace ver que la vida no tiene por qué ser como lo vemos nosotros. Hay millones de maneras de ver la realidad. Hay millones de de verdades. Yo tengo la mía y tú la tuya.
ResponderEliminarUn abrazo.
http://www.declase.es/index.php?option=com_content&view=category&layout=blog&id=20&Itemid=25
ResponderEliminar¡Buenísima selección de comerciales! Muchas gracias, Toni: conocía muchos, pero he sonreído bien a gusto con los que no conocía. Siempre he utilizado la publicidad en clase y me ha resultado un tipo de texto con el que te aseguras el éxito y he disfrutado como un enano con la publi, incluso más que mis alumnos. Recuerdo con nostalgia aquellas clases de COU y el lenguaje publicitario y el apartado que dediqué a la publicidad subliminal. Vimos anuncios subiditos de tono, escenas de Psicosis y El exorcista y hoy en día aún me lo recuerdan muchos ex-alumnos. A mí siempre me ha resultado la publicidad extraordinariamente atractiva y, a la vez, productiva.
ResponderEliminarCuando encuentro un profesor/a de Lengua que habla y muestra a su alumnado la publicidad, el cine, el cómic, me siento como cuando yo enseñaba el guión escrito en el cómic, el vocabulario básico de Plástica o a interpretar en imágenes una poesía o una canción, y pienso que quizás la enseñanza del siglo XXI no esté tan lejos de las aulas. Gracias, Toni, por devolverme a él.
ResponderEliminarPorque luego, mirando la rigidez de los currículos, los viejos libros de texto, las materias que desaparecen, la proliferación del texto y la memoria, la persistencia del examen, y la edad y estado de ciertos centros escolares, yo vuelvo a colocar la I entre las X: seguimos en el siglo XIX.
Miguel: La educación debería servir para librarnos de los prejuicios.
ResponderEliminarNube: Gracias por el enlace.
Marcos: Un profe de lengua que lleva al aula cómics, anuncios, recortables, etc. siempre parecerá un poco majara; pero esto no ha de importarnos, ¿verdad?
Pedro: Ojalá pudiese llevar todas estas cosas al aula de una manera normal. Quizá el día que la pizarra digital sea un objeto habitual en el aula...
Yo las utilizo con frecuencia. Más aún en una asignatura nueva como Opinión Pública y Medios Masivos de Comunicación.
ResponderEliminarLa publicidad permite anmálisis superficiales medios, profundos, formales, temáticos, éticos,etc.
El material que compartes es muy bueno...y gracioso!
Gracias, Diana. Veo que eres bastante activa con los blogs. Nos leemos.
ResponderEliminarMagnífica colección, Antonio. La publicidad es la teología que amuebla y ordena las mentes en dirección a la deidad de nuestro tiempo: el dios mercado y sus promesas de redención aquí, ahora, ya, sin límites. Desentrañar sus mecanismos persuasivos, sean verbales o -sobre todo- audiovisuales, debería ocupar un lugar central en una educación orientada a ampliar la experiencia de los sujetos y darles herramientas emancipadoras.
ResponderEliminarUn saludo cordial.
Gracias, Ángel, por la opinión de un experto. "El dios mercado y sus promesas de redención" podría ser un buen título para definir estos días inciertos.
ResponderEliminarMe ha encantado la idea, muchas gracias. La he resumido un poquito y adaptado para mis estudiantes de español en mi blog, en http://repasando.blog.com .
ResponderEliminarSaludos.
Gracias, Inés, por tu comentario y suerte con tus alumnos de español.
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