Es cualquier cosa menos un manual de literatura, aunque sí hay mucho canibalismo literario. En realidad es un paseo divertidísimo por la cara B de la literatura, no por mostrar a los subalternos sino por estar contada desde el punto de vista de los estéticamente rezagados.
El hilo conductor lo marca una saga familiar de individuos letraheridos que, desde el Romanticismo hasta el 2020 se apuntan al oficio literario con una generación estética de retraso, de ahí su frustración y perplejidad.
En la última parte del libro se nos cuenta la 'Guerra de las dos Marías', quizá uno de los pasajes de metaliteratura en clave de ciencia ficción más divertido que he leído últimamente.
Recomendable para todos los que estén hartos de visiones canónicas de la literatura y de sus vacas sagradas. Algo diferente y que engancha.
Me quedo y apunto aquí algunos de los títulos que he entresacado y que pienso revisar:
Carlos Pujol: Jardín inglés.
Juan Bas: Alacranes en su tinta.
Antonio Ferres: Los vencidos.
Juan Iturralde: Días de llamas.
Robert Fraser: Recuérdalo tú y recuérdalo a otros.
Antonio Ruiz Villaplana: Doy fe.
Fernando Marías: La luz prodigiosa.
Por cierto, me ha sorprendido leer aquí la hipótesis de una empresa de producción de libros a modo de factoria de ensamblaje, en la que los autores son meros actores. Era una idea que había empezado a trabajar yo hace años como posible germen de una novela. ¿Será telepatía?
4 comentarios:
Telepatía, sí; poligenésis, también.
De vez en cuando viene bien pisar el arcén de la literatura. Alivia el dirigismo editorial.
Se me olvidó decir que hay algo de gamberrismo intelectual que me atrae por todo eso del caos, el mundo al revés, etc. De ahí que me gusten, de vez en cuando, novelas como las de Pablo Tusset. Mención especial requiere Antonio Orejudo y 'Fabulosas narraciones por historias' y el primer de Prada en 'Las máscaras del héroe'. Suerte con tus proyectos, que sigo de cerca y copio en la medida de mis posibilidades.
Me lo apunto, y, si puedo, mañana mismo me lo bajo a comprar a Barcelona. Ya te contaré. Necesito enfoques heterodoxos de historia de la literatura. Leí Las máscaras del héroe. ¡Qué bueno!
A mí me gustó mucho, me lo comí, por eso del canibalismo. Una manera muy divertida de ver algunos aspectos de la literatura. Ojo, tampoco está muy desencaminado. Echad un ojito al mundillo editorial, al tongo de los premios literarios y a los personajillos que entre lesbianimso y heterosexualidad te plagian un libro.
Un abrazo!!!!
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